Los mayores polinizadores
Las abejas forman parte de la biodiversidad de la que todos dependemos para sobrevivir.
Los polinizadores contribuyen directamente a la seguridad alimentaria. Según los expertos en abejas de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), un tercio de la producción mundial de alimentos depende de las abejas.
Cuando los animales e insectos recogen el polen de las flores y lo esparcen, permiten que las plantas, incluidos muchos cultivos alimentarios, se reproduzcan. Polinizan las aves, los roedores, los monos e incluso las personas, pero los polinizadores más comunes son los insectos, y entre ellos, las abejas.
Las abejas están en peligro por los pesticidas y la contaminación atmosférica
Pero, lamentablemente, las abejas y otros polinizadores, como mariposas, murciélagos y colibríes, están cada vez más amenazados por las actividades humanas.
Las poblaciones de abejas han disminuido en todo el mundo en las últimas décadas debido a la pérdida de hábitat, las prácticas agrícolas intensivas, los cambios en los patrones climáticos y el uso excesivo de productos agroquímicos como los pesticidas. Esto, a su vez, supone una amenaza para una variedad de plantas fundamentales para el bienestar y el sustento de los seres humanos.
También se cree que la contaminación del aire afecta a las abejas. Las investigaciones preliminares muestran que los contaminantes del aire interactúan con las moléculas de olor que liberan las plantas y que las abejas necesitan para localizar su alimento. Las señales mezcladas interfieren con la capacidad de las abejas para buscar alimento de manera eficiente, haciéndolas más lentas y menos eficaces en la polinización.
Aunque la gran mayoría de las especies de polinizadores son silvestres, incluidas más de 20.000 especies de abejas, la cría en masa y el transporte a gran escala de polinizadores pueden suponer un riesgo de transmisión de patógenos y parásitos. Según el informe de la IPBES, una mejor regulación de su comercio puede disminuir el riesgo de daños involuntarios.
Tomar medidas urgentes
Pero hay señales positivas.
En mayo de 2018, la Unión Europea mantuvo una prohibición parcial de tres insecticidas conocidos como neonicotinoides para mitigar la amenaza letal que suponen para las abejas y su efecto de goteo en la polinización en su conjunto.
El próximo mes de agosto, cuando los líderes mundiales se reúnan en Kunming (China) en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Biodiversidad (COP15), se espera que finalicen el marco de biodiversidad posterior a 2020, que exige, entre otras cosas, la reducción de los pesticidas en al menos dos tercios para 2030.
La ONU ha declarado el 20 de mayo Día Mundial de la Abeja. El Día Mundial de la Abeja sensibiliza sobre el papel esencial que desempeñan las abejas y otros polinizadores para mantener la salud de las personas y del planeta.
Estas son algunas acciones que puedes llevar a cabo para ayudar a preservar las abejas y otros polinizadores:
Plantar flores portadoras de néctar, como caléndulas o girasoles, con fines decorativos en balcones, terrazas y jardines.
Conciencie a los niños y adolescentes sobre la importancia de las abejas.
Conserve los antiguos prados, que presentan una mayor diversidad de flores, y siembre plantas que produzcan néctar
Cortar la hierba de los prados sólo cuando las plantas nectaríferas hayan terminado de florecer.
Usar pesticidas orgánicos.
Usar productos que hagan bien a la calidad del aire.
publicación. www.unep.org